Los niños necesitan, a la hora de la cena, un complemento de los nutrientes que han recibido a lo largo del día. Aunque a veces nos cueste por el ritmo del día a día y lleguemos a casa agotados, los niños agradecen que nos sentemos a cenar a su lado, que charlemos y que lo hagamos en torno a una receta rica para ellos y fácil de preparar para nosotros. Continuar leyendo «Recetas fáciles para niños para cenar»
El queso fresco es una manera muy equilibrada de comer lácteos de la manera más sana. El queso fresco es rico en calcio, potasio, fósforo y vitamina A. Si a eso le sumamos que proceda de la cabra, conseguiremos un alimento con sabor, nutritivo y con aún más ventajas.
La leche de cabra tiene menos lactosa y grasas que la leche de vaca, por ello, está indicada para ser consumida por aquellos que tienen problemas gástricos. Si vas a comer queso fresco como parte de tu cena opta por el de este animal, porque lo digerirás mejor. Este consejo es muy útil también si quieres dárselo a probar a tus hijos, porque sus jóvenes estómagos e intestinos que aún se están formando lo agradecerán.
En los supermecados Gadis contamos con una rica selección de quesos frescos.
El queso fresco de cabra aporta hierro, vitamina D, K y riboflavina a los nutrientes que antes hemos indicado. Su composición es ideal para prevenir desde osteoporisis y anemia hasta problemas respiratorios. Si tu hijo tiene un poco de asma en su niñez, algo muy común, dale este alimento además de llevarlo a natación para fortalecer sus pulmones.
Tener menos grasa que le leche de vaca implica que también tenga menos colesterol y calorías. Si sufres de diabetes o tienes algún trastorno en el corazón, te recomendamos sustituir el queso curado que comes por este. Si necesitas que tenga un poquito más de sabor añádele un poco de óregano, pimienta negra y unas gotas de aceite de oliva virgen extra.
Otra de las ventajas más interesantes de comer queso fresco de cabra es su alto contenido en probióticos, lo que ayudará a la mejora de tu flora intestinal y al desarrollo de tu sistema inmunológico, de nuevo, algo por lo que resulta muy interesante añadirlo a la dieta de tus hijos.
El queso de cabra se digiere mejor, por lo que es perfecto para servirlo de noche
Con todo lo que te hemos contado, tu pregunta ahora será: ¿y dónde puedo comprar queso fresco de cabra? Pues es muy sencillo, acude a la sección de charcutería de nuestros supermercados Gadis y pídelo, deja que te recomendemos sobre cuál elegir y úsalo en bocadillos, tostas, ensaladas o para acompañar una cena con un poco de pavo.
Si consigues sustituir el queso curado por queso fresco conseguirás rebajar tu colesterol y añadir nutrientes que necesitas a tu dieta. El de cabra, además de todas las propiedades que te señalamos, tiene otra ventaja: es muy sabroso. Usa tu ingenio, combínalo con una lámina de salmón o atún y tendrás un aperitivo sano y, sobre todo, exquisito.
Carnes limpias de nervios para niños en nuestro supermercado – ¿Cuál compro? Si quieres que tus hijos coman carne, escoge bien cuál le pones en el plato
A la hora de cocinar, las carnes limpias de nervios para niños son idóneas ya que al ser carnes magras y tiernas son perfectas para el paladar más exquisito de cualquier rey o reina de la casa. La ingesta de carnes es fundamental en la dieta de un niño, ya que esta le aporta proteínas, vitaminas y minerales esenciales para su pleno desarrollo.
Muchas veces, a los niños les cuesta comer de todo, sus pequeños paladares aún se están desarrollando y hay sabores o texturas que no acaban de convencerles. Pero eso no los convierte en malos comedores. Por lo general los platos que más suele costarles comer son las verduras y el pescado, pero también puede haber problemas a la hora de comer carne. Que si está muy dura, que si no sabe a nada, que si no se puede masticar…
Muchas y variadas son las posibles excusas que nuestros hijos pueden poner para no comer si el alimento que tienen enfrente no les acaba de convencer.
Las carnes limpias de nervios para niños son perfectas para que no dejen nada en el plato.
Pero evitar este tipo de hábitos y comportamientos en tus hijos es posible, solo hay que pensar que los paladares de un niño y los de un adulto no son iguales, por lo tanto lo que a nosotros nos parece un plato de carne sin más, a ellos puede parecerles algo imposible de comer. En estos casos y para hacer que nuestros pequeños coman tenemos que, simplemente, saber elegir la carne perfecta para los más pequeños de la casa.
Primero tenemos que saber qué carnes les estamos dando, el primer paso que debemos dar es elegir entre carnes rojas o blancas. La diferencia entre estas dos carnes es debido principalmente al color, las carnes rojas pertenecen a las de vacuno (ternera, vaca) buey, de caza o las vísceras. Mientras que la carne blanca pertenece a la de pollo, pavo y conejo.
Ahora estaréis pensando que me he olvidado del cerdo y del cordero, pues bien, es que la carne de estos animales puede ser roja o blanca, dependiendo de la edad (carne blanca los animales jóvenes y roja los adultos). Cada una de estas carnes aporta valores, nutricionales diferentes, pero a grandes rasgos todas son válidas para la alimentación de tus hijos. La carne blanca por lo general suele gustarle más debido a que es una carne limpia, casi exenta de nervios, por lo que será muy blandita y jugosa para cualquier paladar.
Si eliges carnes limpias de nervios para ellos, verás como los problemas a la hora de la comida desaparecen.
Si por el contrario eliges darles carne roja, tendrás que tener especial cuidado a la hora de elegir el animal y, sobre todo, el corte de la carne, ya que según qué partes pueden estar llenas de nervios y eso conseguirá que tus hijos no se la coman. Las carnes más limpias suelen ser las de ternera y las de cerdo, esto es debido a que el tamaño del animal facilita el corte de la misma. Esto hace que se puedan conseguir cortes de carnes verdaderamente magras y sin ningún tipo de nervio.
Si te has decidido por la ternera, te recomendamos que evites las zonas del pescuezo, el costillar, la falda o el rabo ya que todas estas son carnes secas, con demasiados nervios y muy gelatinosas. En cambio la elección más idónea sería la carne de espalda, llana, solomillo o redondo. Conseguirás una carne magra, sin grasas, ni nervios, perfecta para que tus hijos la coman sin rechistar.
Todas las carnes limpias de nervios para niños son perfectas para cualquier tipo de elaboración.
Piensa que aunque la elección del tipo de carne sea parte importante, después hay que cocinarla. El tipo de elaboración también influye mucho, no es lo mismo comer un buen guiso donde la carne ha estado horas haciéndose que un filete a la plancha. Existen miles de recetas que pueden engañar a cualquier paladar, pero si eliges carnes limpias y sin nervios ya habrás ganado mucho terreno.
En todos los supermercados Gadis encontrarás siempre carne de la más alta calidad, tanto carnes blancas como rojas, y de todo tipo de cortes. Otro truco que puedes hacer para que tus peques coman bien es darles la carne picada, al picarla cualquier nervio o grasa por mínima que sea acaba desecha pero la carne conservará todas sus propiedades y se potenciará su sabor, consiguiendo así que tus hijos no tengan la mínima queja a la hora de sentarse a la mesa.
Que a un niño no le gusten las verduras es el pan nuestro de cada día. Puede que su presentación no le resulte agradable, que su sabor no le convenza o que no comprenda lo buenas que son para él; es normal, tus hijos aún son muy jóvenes para saber que las necesitan para crecer sanos y fuertes.
Hoy queremos recomendaros tres recetas que seguro que les gustan, logrando que valoren el sabor de los productos de la huerta para que poco a poco puedan hacerse más presentes en las comidas diarias. No es una cuestión de “camuflarlas”, pero sí que es buena idea ofrecerles verduras que se integren en los platos de manera que no parezcan ellas las protagonistas.
¿A tu hijo no le gusta la verdura? Prueba con nuestra receta de croquetas
Para la primera de nuestras recetas de verduras para niños a los que no les gustan elegimos la elaboración de unas ricas croquetas. Para ello usaremos los ingredientes típicos para hacerlas: sal, aceite, 4 cucharadas grandes de harina de trigo, un litro de leche y un poco de perejil, añadiéndoles zanahoria, pimiento verde, un poco de cebolla y calabacín. Escogemos estas verduras por el dulzor que aportan, por sus atractivos colores y porque bien preparadas no se presentan como tropezones, sino como aportaciones deliciosas a la receta, por eso, lo mejor que puedes hacer es rallarlas y no cortarlas en taquitos. Si tus hijos son especialmente maniáticos con las verduras, añade a la receta un poco de queso rallado.
Sofríe las verduras. Cuando estén listas añade la harina y remueve. A continuación vierte la leche y sigue moviendo la mezcla hasta que espese. Añade el queso, espera a que se enfríe, da forma a las croquetas, rebózalas y fríe. Les encantarán.
Los espaguetis con verduras y un poco de soja son sensacionales
La pasta es una de las estrellas de la alimentación de los niños, les aportan hidratos de carbono que necesitan para jugar y correr. La preparación de esta receta es muy sencilla, por un lado sofríe con fuego vivo mazorquitas de maíz, champiñones, zanahorias y pimientos cortados en porciones pequeñas y, por el otro, cuece los espaguetis.
Cuando estén listos, retírales el agua y añádelos sobre la sartén en la que has preparado las verduritas, vierte la salsa de soja y remueve. Podrás encontrar la salsa de soja en nuestros supermercados Gadis, en el mismo pasillo en el que está la de tomate y la mahonesa. La clave de este plato es controlar la sal, por lo que no añadas ni una pizca a los espaguetis ni a la verdura, pues el preparado de soja ya tiene suficiente.
Una rica tortilla con verduras es perfecta para las comidas veraniegas
La tortilla es un plato que fascina a grandes y pequeños. Antes de freír las patatas introduce las verduras y hortalizas de tu elección que más te gusten en la sartén, como pimientos, calabacín o espárragos verdes. Cuando se pongan blanditos, añade las patatas y sigue la receta que usas habitualmente.
Suele ser un buen plan añadir verduras a platos que tus hijos conocen, así que acude a nuestra sección de frescos en tu supermercado Gadis más cercano y deja volar tu imaginación. Empieza por estas recetas que te recomendamos y luego crea las tuyas. Si son divertidas, ricas y llenas de color y sabor, seguro que les acabará convenciendo su presencia en cada uno de tus platos.
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