Pedimos en la pescadería que nos limpien de espinas y piel el trozo de bonito del norte. Yo también le retiro toda la zona de sangre roja llamada sangacho, porque, para mi gusto, le da un sabor muy fuerte y marcado al pescado.
Troceamos los lomos ya limpios en dados de unos 3 x 3 centímetros y reservamos.
Con ayuda de una mandolina cortamos muy finos: 3 zanahorias, 1 cebolleta, 1 cebolla roja pequeña y la parte blanca de un puerro.
Colocamos las hortalizas en una tartera amplia, añadimos 2 vasos (tamaño vino) de aceite virgen, sal y encendemos el fuego. Dejamos pochar las verduras unos 5 minutos y, a continuación, añadimos bolitas de pimientas variadas, otros 2 vasos de vinagre de manzana (mucho más suave) y 2 vasos de vino blanco gallego. Dejamos cocinar 2 minutos a fuego fuerte para que se evaporen los alcoholes.
Pasado este tiempo, bajamos un poco el fuego y tapamos para que no se nos evapore más líquido. Dejamos cocinar 15 minutos o hasta que comprobemos que la zanahoria esta entera pero no dura.
Volvemos a poner al fuego a toda potencia y, cuando el escabeche esté hirviendo a tope, es el momento de añadir los trozos de bonito reservados y de salarlos.IMPORTANTE: en ese momento, tapamos la tartera y la retiramos del fuego. Dejamos que el calor residual haga el milagro mientras el bonito reposa en su escabeche durante 10 minutos. Pasado ese tiempo, con cuidado, le damos la vuelta a todos los trozos. Volvemos a tapar y dejamos otros 10 minutos hasta se termine de hacer el pescado.
Ya sólo nos queda acompañarlo de unos cachelitos hechos en el micro en 5 minutos y disfrutar al instante de una comida sana y maravillosa cada vez que lleguemos acalorados de la playa o del trabajo…